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La influencia china, en el centro de la discusin entre Estados Unidos e Italia

Actualizado

Estados Unidos quiere que Italia salga de una iniciativa china que persigue la construccin de masivas infraestructuras desde el pas asitico hasta Europa

La primera ministra Giorgia Meloni, en Washington.DREW ANGERER / AP

Cuando el presidente estadounidense, Joe Biden, y la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, se renan hoy en la Casa Blanca, el tema de conversacin central ni ser Ucrania, Rusia, o el movimiento hacia el populismo de Europa, que la propia jefa del Gobierno transalpino simboliza.

El tema ser China. Estados Unidos quiere que Italia salga de la controvertida Iniciativa ‘Belt and Road’ (BRI, segn sus siglas en ingls), de China, que persigue la construccin de masivas infraestructuras desde el pas asitico hasta Europa, cruzando toda Eurasia. Y la propia Meloni est considerando hacerlo. Y por una amplia serie de motivos. Uno es que la rentabilidad econmica del proyecto -calificado por muchos como ‘la Nueva Ruta de la Seda’- es ms que cuestionable. De hecho, quien meti a Italia en la BRI fue otro populista de derechas, Giuseppe Conte, en 2019.

Los proyectos de infraestructura de esta nueva ‘Ruta de la Seda’ han sido en numerosas ocasiones de una calidad muy inferior a la prevista y han sido realizados teniendo ms en cuenta los intereses geopolticos y econmicos de China que los de los pases en los que stos se llevaban a cabo. Autopistas sin salidas, puertos demasiado grandes para la demanda de trafico naval, o carreteras a ninguna parte han sido algunos de los proyectos fallidos de la ‘Belt and Road’ en pases tan heterogneos como Montenegro, Sri Lanka o Kenia.

A ello se suma, evidentemente, el componente estratgico. El proyecto se dirige a lograr la entrada -y a veces el control- de China de una serie de infraestructuras crticas, como puertos, aeropuertos, redes elctricas, y vas de comunicacin terrestre, adems de los sistemas tecnolgicos asociados a ellos. Con la proliferacin del 5G y de la internet de las cosas, que un pas extranjero tenga la capacidad de controlar el sistema de distribucin elctrica de un pas es un riesgo potencial muy importante. Pero el control no es puramente tecnolgico.

En principio, el sector de los seguros no parece que tenga mucho que ver con las infraestructuras. Pero, como ha puesto de manifiesto un reciente estudio del think tank de Washington The Dialogue, la expansin de la Franja y la Ruta se ha visto acompaada de, por ejemplo, aseguradoras chinas que no solo protegen del riesgo financiero a las empresas -chinas- que llevan a cabo las obras de infraestructuras, sino que tambin cubren los seguros de los barcos, camiones y trenes que utilizan esas infraestructuras.

Meloni no tendra problemas en salir de la BRI, dado que Conte solo firm un Acuerdo de Entendimiento (Memorandum of Understanding, o MoU), que se renovar automticamente en marzo que viene. Pero, si una de las partes decide no hacerlo, el documento deja de tener validez sin mayores consecuencias. De hecho, la primera ministra ya anunci su intencin en mayo. Pero hay un factor poltico: China podra adoptar represalias -sutiles, pero eficaces- con las empresas chinas que operan en ese pas. Por pura casualidad, el diario del Partido Comunista Chino en ingls Global Times ha recordado que “por ejemplo, entre 2019 y 2021, las exportaciones italianas a China aumentaron en un 42%“, en un editorial significativamente titulado La decisin de Italia en relacin a la BRI debe hacerse sin la influencia de EEUU.

Pero, ms all del caso Italiano, la Nueva Ruta de la Seda est embarrancando en las realidades econmicas y polticas del mundo. No es solo que muchos de sus proyectos no tengan la utilidad que se les esperaba. Es que en otros casos han llevado a la ruina a los pases que los han aceptado. Para expandir su segundo mayor puerto, el de Hambantota, que era parte de la Nueva Ruta de la Seda Sri Lanka, asumi una deuda tan grande de China que acab cayendo en la suspensin de pagos, y tuvo que entregar ese mismo puerto a Pekn durante 99 aos.

Una serie de pases africanos y asiticos -desde Zambia hasta Laos- han cado en la suspensin de pagos, a pesar de lo cual China se niega a llevar a cabo quitas de la deuda, aunque al menos ha accedido a extender los plazos de devolucin de unos crditos que a da de hoy esas naciones no pueden pagar. La Nueva Ruta de la Seda es, as pues, una cadena -de seda, eso s- al cuello de algunos de los pases que han entrado en ella.

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By Luis Morales

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